NO SE PUEDE SERVIR A DOS SEÑORES SIMULTÁNEAMENTE.
NO SE PUEDE SERVIR A DOS SEÑORES SIMULTÁNEAMENTE.
Patricio Orellana Vargas
Cuando el canciller de Inglaterra, Lord Thomas More fue requerido por su soberano, Enrique VIII. para que tramitara su divorcio con Catalina de Aragón, porque era un hombre con muy buenos contactos en El Vaticano, éste se enfrentó al dilema de decidir si servía al rey o a Dios. Llegó a la conclusión que había que optar entre obedecer a uno o al otro.
Su decisión fue dramática, decidió desobedecer al rey y se negó a efectuar el juramento de la ley de Supremacía. En consecuencia fue ejecutado en 1535.
En Chile, este drama universal de ser capaz de elegir entre dos señores, se reproduce, no ya en un nivel de tragedia solemne, sino en el pedestre nivel de comedia provinciana,
El Sr. Fernando Bustamante, empresario de éxito, simultáneamente sirve a dos señores sin ningún problema de conciencia, él preside la empresa METRO que es una empresa del Estado, aunque legalmente asume la forma de sociedad anónima. Simultáneamente sirve los intereses de una empresa privada y transnacional, la TELEFONICA, de la cual es director.
Cuando se le presenta el dilema de optar por una u otra, ya que permanecer en la TELEFONICA significa asumir una demanda en contra de los intereses del Estado, lo hace sin ningún problema: seguir en ambas.
Es un hombre de conciencia ambidextra, sirve simultáneamente su bolsillo de derecha y su bolsillo de izquierda. Sirve lo social (la empresa del Estado) y sirve lo privado (la empresa privada).
No tiene el problema que tuvo Lord Thomas More, al contrario, si se puede obtener beneficios de Dios y del Diablo, hay que servir a ambos. Además nadie lo va a ejecutar si no toma opción. Al contrario.
El representante del gobierno, Sr. Heraldo Muñoz resolvió el problema utilizando la lógica formal: “No existe incompatibilidad entre ser miembro de una sociedad anónima como es el Metro y otra como la CTC TELEFONICA”.
Claro, SA=SA. Pero la lógica formal es superada por la lógica dialéctica porque la verdad es que el signo “igual” es “diferente” en este caso, porque son totalmente distintas una empresa que tiene como fin brindar un servicio a la comunidad y otra que tiene como fin único generar utilidades a sus propietarios, como lo establece reiteradamente Milton Friedman.
En nuestro nivel provinciano no existe el dilema que debió enfrentar Thomas More, porque aquí, Dios y el Diablo están de acuerdo que se sirva a ambos simultáneamente.
Crítica globalizada.
Este caso es criticado por casi todos los sectores. La Democracia Cristiana exige la renuncia como Presidente del Metro de Bustamante. La UDI y Renovación Nacional lo consideran reprochable. El Partido Socialista, partido al cual pertenece Bustamante considera incompatible estas dos funciones. Lamentablemente, el PPD, que ha tenido una actitud clara en Ética Pública, sufre un grave traspiés y según Girardi “nada tiene que ver una función con otra” y respalda al ambidextro.
Habría sido muy importante una unanimidad en algo que es tan transparente y que se ha discutido en muchas oportunidades a través de la historia. El PPD demuestra quedarse en la comedia lo provinciana y es incapaz de entender la trascendencia de que no se puede servir a dos señores simultáneamente: se está con el interés de lucro de la empresa privada o con los fines sociales de la empresa pública.
La actitud de Thomas More significó que fuera santificado por el Papado y se constituyó en un Santo de la Iglesia Católica.
Bustamante, evidentemente no será santificado, excepto que a nivel provincial se cree una nueva iglesia que tenga como ser supremo a un Dios-Diablo.
2002